Índice de contenidos
Si eres de esas personas que has dicho !basta! a trabajar para cumplir los sueños de otros y te has decidido a emprender tu propio proyecto seguro que te asaltan un montón de dudas. Lo ideal es empezar con buen pie así que este artículo te ayudará a conocer los 5 pasos necesarios antes de emprender un proyecto.
Sentar las bases de un negocio
Emprender es uno de los retos más importantes del éxito profesional y por supuesto, personal. Sin embargo, cuando pensamos en la posibilidad de montar una idea de negocio debemos intentar ir más allá de esa idea para poner el foco de atención en nosotros mismos.
Es decir, como emprendedor eres un protagonista fundamental de tu propio proceso de crecimiento profesional. Por tanto, tu autoestima es un activo de talento. Cuando una persona quiere ser emprendedora no solo debe centrarse en el plan negocio, sino también ser capaz de reconocer sus talentos para poder ponerlos al servicio de los demás, y obviamente, en su negocio.
Ahora sí, vamos con esos 5 pasos necesarios para emprender
Elegir un negocio que me guste
Suena a tópico aunque es la madre de los consejos que un emprendedor debe seguir. Tanto que te apasione tu proyecto como que se ajuste a ese ideal de vida con el que siempre has soñado.
Elige un producto o servicio que cubra una necesidad a aquél cliente ideal para ti, con el que sientas afinidad o identificación.
Si haces lo que te gusta, con pasión y pensando en la necesidad de quien está al otro lado, lo más probable es que tu negocio funcione.
Aprovechar las fortalezas
Es muy posible que sientas vértigo emocional si únicamente te fijas en los principales obstáculos o posibles riesgos que supone emprender tu proyecto.
Sin embargo, tu motivación y confianza es más fuerte cuando también eres capaz de ver tus posibilidades y tus fortalezas. La capacidad de ver y aprovechar oportunidades es algo que se debe entrenar, es cuestión de hábitos.
Definir un propósito
Tener un propósito, una misión, un “para qué”. No importa el nombre que le pongas, basta con que visualices las consecuencias que quieres en tu vida y en la de los demás al sacar adelante tu proyecto.
Tener claro esto, es lo que hace que nuestra energía sea alta y nuestra actitud totalmente proactiva.
Párate a pensar qué es lo que realmente sientes que te haría muy feliz hacer, ¿cómo te gustaría que te recordasen las personas con las que has trabajado?
Pasar a la acción rápidamente
Más vale hecho que perfecto. La mayor parte de las ideas se quedan en el plano teórico y no las llevamos a cabo por miedo, dejadez o cualquier creencia limitante.
Es importante dar el paso al ámbito de la acción para dar forma a esa idea de negocio. En mis procesos de mentoring soy muy pesado con tener planes de acción concretos y a esos clientes que se resisten más, les pregunto: ¿Por qué no darte la oportunidad de intentarlo? ¿Qué es lo peor que puede pasar? Y si ocurre eso tan malo, ¿encontrarías la solución?
En cualquier caso todas estas respuestas son solo fruto de una realidad que aún no existe, estás generando un futuro incierto y eso intoxica tu presente. ¿Quieres respuestas reales? ¡Pasa a la acción!
Convierte tu situación en una oportunidad
Si hay una verdad universal es que tu situación, tus experiencias y etapa vital son únicas en el mundo. Sea cual sea tu situación, esta será perfecta para convertirla en oportunidad si sabes como hacerlo y si tienes en cuenta los 4 pasos anteriores.
Los dos motivos principales por los que las personas no se lanzan a emprender son por su situación económica o por su edad.
Si tu situación económica no es buena, esa es la mejor razón para lanzarte a montar tu propio proyecto y poder, en un futuro, tener una mejor economía. Antes de nada, hay que aprender a sanear esas cuentas y tomar mejores decisiones en donde invertir el dinero.
En el caso de que sea tu edad la que te hace sentir limitado, probablemente el problema es que seas demasiado joven o demasiado mayor. Nada más lejos de la realidad ya que puedes convertir tu edad en un valor.
La juventud te aportará energía, formación actualizada, contacto con el mundo online… has nacido con una tablet debajo del brazo ¡aprovéchalo!
Si en lugar de con una tablet, naciste con un tocadiscos bajo el brazo, aprovecha tu experiencia vital, la sabiduría que sólo se adquiere con años vividos, con horas de vuelo. Te ayudará muchísimo para tener un vista panorámica de tu negocio, mayor análisis y mejor toma de decisiones.
En cualquier caso, no dejes que la edad frene tus posibilidades.
Y ahora, ya sabes todo lo necesario para emprender con garantías tu proyecto. ¿Sigues teniendo muchas dudas? Escríbeme y las resolvemos juntos
Puedes darle a “Me Gusta” y seguirme en Facebook e Instagram o Suscríbete en mi canal.
Buenos consejos Alberto. Pones el dedo en la llaga de “la edad”. Es la excusa, que tanto por abajo como por arriba, se suele utilizar con frecuencia, para no afrontar el dar ningún paso hacia adelante. Gracias